Los fabricantes de Tejas asociados a Promotejado reivindican este material como el más seguro para la cubierta.
Los últimos temporales que han azotado la península ibérica han contribuido al desprendimiento de varios tejados de chapa metálica.
El informe de Patologías en edificación de la Fundación MUSAAT estima que un 10% de los daños en cubierta son debido a los desprendimientos de la infraestructura.
19 de noviembre de 2020. A finales del pasado mes de octubre, los medios de comunicación recogían los efectos del último gran temporal en atravesar la Península Ibérica. La tormenta Bárbara dejaba a su paso gran cantidad de precipitaciones, rachas de viento de hasta 170 kilómetros hora y daños materiales de infraestructuras de cientos de miles de euros.
Cubiertas metálicas como la de un colegio de Valdetorres del Jarama o la de la cubierta de la Casa de la Cultura de Orendain salían despedidas por la acción de los fuertes vientos provocando grandes daños materiales y, afortunadamente, sin ocasionar en esta ocasión ningún daño personal.
Noticias como esta hacen que se cuestione la seguridad de las cubiertas en situaciones adversas como fuertes lluvias, heladas, vientos huracanados. Por este motivo, los fabricantes de Tejas asociados a Promotejado han querido lanzar un mensaje recordando la seguridad de la teja incluso ante los fenómenos meteorológicos más adversos
Ensayos efectuados por fabricantes de tejas asociados a Promotejado demuestran que ni siquiera un viento de 180 km/h es capaz de levantar este tipo de material instalado en la cubierta. Este mismo ensayo probó la capacidad de una teja de mantenerse intacta ante lluvias torrenciales superiores a 6 litros por minuto y metro cuadrado.
“Elegir un tejado de tejas es recomendable no sólo por su buen comportamiento energético o sus posibilidades de diseño y estética, es también muy importante fijarse en la seguridad que tendrá toda la infraestructura, no solo en condiciones normales, sino también ante la posible irrupción de circunstancias climatológicas adversas”, asegura el presidente de la sección de Tejas de Hispalyt, Noé Román.
Según el “Análisis estadístico nacional sobre patologías en la edificación”, elaborado por la fundación MUSAAT” los desprendimientos son protagonistas del 10% de las patologías que ocurren en una cubierta, por lo que es importante contar con materiales que se fijen con garantía al tejado de los edificios. En muchas ocasiones estos desprendimientos se producen por efecto de la corrosión y la oxidación de la zona de unión entre los tornillos y la chapa metálica que provoca un rápido deterioro de la infraestructura.
Humedades, corrosión, fuego
Este mismo informe señala que las humedades y filtraciones son la primera causa de problemas en una cubierta (con un 52% de las patologías). “Un tejado de tejas, bien instaladas, es también una garantía frente a humedades y goteras. Por este motivo la mayoría de fabricantes ofrecemos amplias garantías sobre nuestros productos”, manifiesta Román.
La misma situación se da frente a la acción del salitre en zonas costeras que corroe cualquier elemento metálico como la chapa, mientras que la teja no es corrosible ni se oxida ni en los ambientes más expuestos.
Pero además de los posibles riesgos provocados por el viento, la lluvia o la acción del mar, los tejados de tejas son también un elemento pasivo eficaz para proteger los inmuebles en caso de incendio, como los que puedan iniciarse, por ejemplo, por la caída de un rayo en cubierta. “Por sus características, las tejas cerámicas ofrecen un excelente comportamiento frente al fuego. No son combustibles, no emiten gases ni humos en contacto con la llama y no contribuyen al incendio. Desde el punto de vista de la reacción al fuego están clasificadas por la Comisión Europea como A1, lo que significa que no es necesario realizar ensayos, dado su excelente comportamiento frente al fuego, garantizando la máxima seguridad para el usuario”, explica el presidente de la Sección de Tejas de Hispalyt.
Para más información visita: https://tejadodetejas.es